domingo, 15 de agosto de 2010

La nada de un alma perdida.

Hoy trascurre el tiempo aun muerto he inerte, no se porque todavía me invade la pena.
Pues nada de lo que desee pude tener ya es tremendamente tarde. Para todo, pues ya solo esta mi alma muerta. Que aun desea respirar desde su ahogado deseo mudo


Por el silencio crujir de las ramas muertas, aun mi profundo anhelo intenta salir de los más hondo de mi ser…pero no puede, aun puedo oír tus silenciosos gritos que me llaman. Pero solo puedo escuchar tú susurro el resto de ti me quedo vedado y aquí


Sobre el llano de un deseo muerto me encuentro. No estoy segura pues quizás me
Encuentre en la misma nada…pues no veo a nadie.
Es difícil de saber el porque tarde o temprano una persona deja de sentir, lo que ya
Circula por su misma sangre, y que ya es parte de mí, de mi esencia y de mi ser.
Del cual ya perdí hasta el control, me gustaría poder gritar en este desierto…
Que es la nada de mi alma, que siempre te ame y que siempre me tuviste. Pero se que
Ya es tarde, mi corazón es arena y mi alma se seco, como lo hace un desierto pues

Rara vez puede llover en el…

Mientras tanto seguiré pensando que todo deseo puede realizarse algún día.
Deseo regalarte mis ultimas lagrimas…no se si las querrás, pero son tuyas.
También te ofrezco el último retazo de mi corazón. Mi alma no ella no te
La puedo dar, ya la perdí hace tiempo ya no siento ni padezco solo
Existo...

2003

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